Laura Catalina Valencia Delgado
Nursing
“Percibir la adversidad como un desafío es descubrirse en plena acción”, esta frase del libro Más fuerte que la adversidad de Walter Riso, es la oración que más destaca Laura Catalina Valencia Delgado, una recién graduada de Enfermería y estudiante de la Especialización en Administración de la Salud, que sufrió de disatonomía, una disfunción del sistema nervioso, situación que si bien es cierto fue un obstáculo, le permitió demostrar lo fuerte que era y la convirtió en una persona más empática y humana con quienes la rodean.
Aunque se inclina por el área administrativa y su visión holística del sistema, Laura menciona que su enfermedad le ayudó a ver la enfermería desde el punto de vista del paciente, entender sus necesidades, angustias, entre otros, pero también le permitió descubrir que desde la administración puede optimizar recursos humanos, físicos, y tecnológicos, para brindar una atención de calidad a los pacientes.
Durante su recorrido por la UCM, menciona que uno de sus días más felices fue al iniciar las prácticas de cuidado básico que le permitió tener su primer contacto con pacientes.
“Ser enfermera significa acompañar a las personas en las diferentes etapas de su ciclo vital, procurando brindar todos los cuidados necesarios para mantener su calidad de vida. No solo implica tener conocimientos teóricos y prácticos, sino también tener vocación de servicio y empatía”.
Emprendimiento para la salud
Con su paso por el Semillero de Emprendimiento, Laura junto a sus dos amigas Ana Sofía Muñoz y Ximena Osorio crearon ArtriOil, un aceite a base de plantas medicinales para tratar los principales síntomas de la artritis reumatoide y que esperan sacar pronto al mercado:
“Decidimos buscar una alternativa innovadora para mejorar la calidad de vida de personas diagnosticadas con esta enfermedad. Después de una exhausta búsqueda y revisión bibliográfica definimos 6 componentes para potenciar el efecto analgésico y antiinflamatorio de las plantas medicinales”.
Para Laura, la UCM cultiva el intelecto, la ética y el sentido humanista de las profesiones, habilidades que exige hoy el desempeño profesional. Esto y sus experiencias personales, le permiten soñar con contribuir en la salud de las personas que necesitan atención. Además, los momentos vividos, las personas que conoció, los profesores y pacientes, le permitieron entender que es necesario demostrar incondicionalidad y hacerle saber a las personas que cuentan con su apoyo en todos los procesos del servicio de la salud.
Por Cristian Camilo Ruden
Unidad de Comunicaciones
cruden@ucm.edu.co