El plagio en el año 2018 ya no es un tema tabú como lo era en el año 1999. Ahora lo vemos como un problema y una seria amenaza popularizada en los entornos universitarios, tanto en los profesores como en los estudiantes.
La educación configura lo que, en términos de Bourdieu (2002), se denomina un campo intelectual, es decir, una comunidad académica, la cual tiene unas reglas determinadas y en donde se desarrollan procesos formativos en las diferentes asignaturas y seminarios, mediante elaboraciones de trabajos o tesis por parte de los estudiantes y de los profesores; es aquí también donde los libros, capítulos de libros, artículos y documentos de trabajo legitiman dicha comunidad.