35 personas próximas a finalizar su condena en el Centro de Reclusión de Varones “La Blanca” de Manizales están más preparadas para su reinserción social después de haber terminado un diplomado orientado por la Universidad Católica de Manizales que les capacitó en panadería, repostería y manipulación de alimentos, barbería, emprendimiento, primeros auxilios y componente humano social.
Como parte de su compromiso con la transformación social y la inclusión, la Universidad Católica de Manizales (UCM) culminó con éxito un convenio con el INPEC Dirección Viejo Caldas 2024, orientado a la preparación para la libertad de personas privadas de la libertad en el Centro de Reclusión de Varones “La Blanca” de Manizales.
El pasado 20 de noviembre, se realizó el evento de clausura y certificación, que marcó el cierre de un proyecto diseñado para fortalecer las capacidades humanas, sociales y laborales de los participantes, favoreciendo su reinserción en la sociedad. La ceremonia contó con la presencia de autoridades de la UCM y del INPEC, destacando el trabajo conjunto entre las instituciones.
El proyecto, liderado por el Centro de Innovación UCM en la línea de Innovación Social, Emprende UCM y la Vicerrectoría de Bienestar y Pastoral Universitaria, ofreció formación en áreas clave como:
- Componente Humano Social: 32 horas de formación con 13 certificados.
- Panadería, repostería y manipulación de alimentos: 60 horas de formación con 20 certificados.
- Barbería: 32 horas de formación con 11 certificados.
- Emprendimiento: 32 horas de formación con 18 certificados.
- Primeros Auxilios: 32 horas de formación con 16 certificados.
En total, 35 personas culminaron satisfactoriamente el proceso, recibiendo certificaciones que respaldan su aprendizaje y habilidades adquiridas.
Más allá de la capacitación
Gracias al apoyo de la Vicerrectoría de Bienestar y Pastoral Universitaria, se entregaron kits de aseo a cada participante, reforzando el componente humanitario del proyecto. Además, las palabras de gratitud de los beneficiarios reflejan el impacto positivo de esta iniciativa:
“Agradecer a la Universidad Católica de Manizales por acordarse de nosotros los presos y ayudarnos para tener un mejor futuro cuando cumplamos la condena. Gracias a todos los profesores que nos acompañaron con tanto amor, Dios los bendiga“.
Este proyecto reafirma la misión de la UCM de construir una sociedad más justa y solidaria, alineada con su Mega 1: ser reconocida como una comunidad inclusiva y multicultural que contribuye a un mundo más fraterno.
La Universidad Católica de Manizales sigue siendo un referente de proyección social, trabajando de la mano con aliados estratégicos para transformar vidas y abrir nuevas oportunidades para quienes más lo necesitan.
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