Juan Camilo Cardona Tabares
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Publicista para mí significa ser niño, adolescente, adulto y anciano, porque en cualquier etapa de nuestra vida podemos transportarnos a comunicarle algo a aquello que ya fuimos y a comunicarle algo a aquello que seremos. Para mí ser publicista es ser lo que tú quieras; escritor, abogado, psicólogo o arquitecto, solo que sin dejar de ser publicista.
Juan Camilo Cardona Tabares
Así define esta área profesional. Y es que no es coincidencia la pasión y entrega a su programa que día a día crece más en Juan Camilo.
Sus primeros acercamientos a la publicidad se dieron en el bachillerato, exactamente en noveno grado. Allí, conoció diferentes herramientas digitales que lo sedujeron y lo conectaron con un mundo que, en ese momento, era intuitivo y lleno posibilidades creativas. Su gusto por estas herramientas fue tanto, que en su tiempo libre se puso la meta de aprender y desarrollar esta habilidad, lo que le permitió destacarse entre sus compañeros de clase, hasta convertirse en su tutor y luego asistente del equipo de comunicaciones de su colegio.
Aunque durante su recorrido por la Universidad llegó a desmotivarse en algunos casos, el amor inexplicable que siente por su carrera no lo dejó desfallecer.
Muchas veces la creatividad y la intuición nos falla, no siempre tenemos la respuesta para todo, y en esos momentos comprendí que la frustración es el sentimiento más frecuente con el que un publicista se enfrentará durante toda su vida.
Y esas batallas interminables por sacar productos integrales dieron fruto con el tiempo. En 2019 su triunfo en el taller ODISEA y sus cuatro galardones en los premios CREMA, fueron la recompensa a su sacrificio, esfuerzo y pasión.
Ver mis proyectos en la pantalla, recibir un aplauso de todos y tener la recompensa en la mano con forma de estatuilla me llenaron aún más el corazón, para seguir luchando por esto que llevo en la sangre, por este sueño cumplido de ser publicista.
El arte y la escritura, sus bases creativas
Este joven que se define como perfeccionista, profesional, tenaz, apasionado y ambicioso, fue cautivado por la lectura y la escritura desde niño. Moby Dick, Cien años de soledad, entre otros, lo inspiraron a crear sus propios escritos; entre ellos “El monje”, una historia de suspenso, y “Un camino a la felicidad”, cuento corto que fue ganador del premio CREMA 2019 en la categoría editorial. Además, desde 2020 su gusto por la estética y el arte lo convirtieron en fiel admirador de Van Gogh, Picasso, Gauguin y El Greco, artistas que le han permitido alimentar su creatividad y aprender de corrientes artísticas que le permitan conocer sobre diferentes propuestas para implementar en sus diseños
Para Juan Camilo, la publicidad está marcando hitos importantes en la actualidad. Entre sus sueños está poder desarrollar acciones comunicativas, campañas y productos publicitarios que perduren en el futuro. Aunque en este momento sus sentidos están enfocados en su proceso formativo, espera seguir creando publicidad que enamore, inspire, y valga la pena, como menciona, “una de mis metas es hacer publicidad con propósito”.
Por Cristian Camilo Ruden
Unidad de Comunicaciones
cruden@ucm.edu.co