¿Alguna vez has imaginado estar en un camino que no tiene salida y no encontrar opciones para llegar al destino? Más o menos así se ve un mundo en el que la accesibilidad universal es un factor que pasa a segundo plano, una realidad que afecta a muchas personas cuando se encuentran en espacios que no cumplen con las condiciones o con un diseño que tenga en cuenta el acceso para todos. Este es un tema que apasiona a Luisa Fernanda Betancurt, estudiante de sexto semestre de Administración de Empresas Turísticas.
Luisa inició su carrera cuando aún estaba en el colegio, una chispa de curiosidad la motivaba a probar algo diferente y la encaminó con entusiasmo a cursar el Técnico Profesional en Operación de Servicios Turísticos, que ofrece La UCM en alianza con la Fundación Luker como parte del programa “Universidad en tu Colegio”, que brinda acceso a programas técnicos profesionales a estudiantes de colegio de grado décimo y once de instituciones públicas y privadas de Manizales.
Esta posibilidad de formación les permite a los estudiantes graduarse del colegio con un título profesional como técnicos y continuar sus estudios en la Tecnología en Gestión de Empresas Turísticas y finalmente sus estudios profesionales en un menor periodo de tiempo. Este es el caso de Luisa, que tras cursar ambos programas en la UCM, ingresó a la carrera profesional de Administración de Empresas Turísticas en sexto semestre, gracias a la homologación de los conocimientos académicos ya adquiridos.
Como persona con discapacidad, Luisa se siente atraída por la idea de poder viajar y conocer lugares diferentes, aprender sobre nuevas culturas e idiomas y, sobre todo, tener como referencia los avances respecto a la accesibilidad universal que otros países han implementado. Lo que más la motiva es darle un enfoque de inclusión a las actividades que giran en torno al turismo; para ella es importante aportar desde su conocimiento y experiencia para que todas las personas que presentan algún tipo de discapacidad, condición o necesidad especial, puedan disfrutar de actividades turísticas y recreativas.
He visto que muchos lugares no cuentan con los espacios ni las herramientas necesarias para atender y satisfacer las necesidades de las personas con discapacidad
La realidad de Luisa transcurre día a día, no se detiene a pesar de las dificultades. Sueña con todo lo que puede hacer hoy para mejorar su futuro y el de las personas cuyas necesidades presentanunretoparalasociedad“Implementar mejores herramientas y diseños que faciliten la accesibilidad, son cambios importantes que para otros pueden ser pequeños, pero que para una parte de las comunidades son muy valiosas y de gran ayuda”.
Aprender es su mayor prioridad, desde que inició su técnico en el colegio ama estudiar administración y todo lo relacionado con el barismo y el café, por eso ocupa todo su tiempo al máximo en actividades que, más allá de la carrera, pueden aportar a su vida personal y profesional; entrena dos o tres veces por semana en el gimnasio y hace parte de la Escuela de Liderazgo de la UCM en donde aprende a potenciar sus habilidades de manera integral. Está convencida de que en un futuro todo lo que siembra le permitirá liderar diversos proyectos en el sector turístico para construir mejores oportunidades para las personas en condición de discapacidad.
La accesibilidad universal no es solo un requisito para ciertos lugares, sino que incluye procesos, productos, servicios, objetos, dispositivos y herramientas que tengan como objetivo mejorar la habitabilidad de los espacios para todo tipo de personas. No es una cuestión meramente reglamentaria, más bien, de simple conciencia y empatía, desear que en todo prime el bienestar de las personas.
Luisa nos recuerda que a nuestro alrededor no todas las personas viven la misma realidad, las necesidades son tan diferentes como cada uno de nosotros. Todo lo que debemos hacer es mirarnos con amor, paciencia y compresión y seguir caminando de la mano.
Por Leandra Katherin Bedoya Cifuentes
Unidad de Comunicaciones
leandra.bedoya@ucm.edu.co